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Conservación
de los materiales
Uno
de los aspectos que hace que este hallazgo sea tan extraordinario, es
la excepcional conservación de los objetos, en especial de los
restos vegetales, los textiles, las figuras de madera, el papel amate,
etc.
Esto
ha hecho posible que podamos conocer elementos rituales que anteriormente
sólo habíamos observado en códices, además
de que nos da una idea de cómo podían ser las algunas de
las ofrendas del Templo Mayor, en las cuales los componentes perecederos
desaparecieron, por el paso inequívoco del tiempo. Debido a su
importancia, esta clase de objetos requerían un cuidado muy especial,
por lo que de manera paralela a la excavación, se desarrolló
un proyecto de conservación in situ, realizado por un equipo de
especialistas coordinado por la restauradora Lourdes Gallardo. En cuanto
al proceso que se llevó a cabo, éste fue sumamente minucioso
y muchas veces implicó que partes de la ofrenda se levantaran en
bloques, para ser trabajados en el laboratorio, bajo óptimas condiciones,
que permitieran su estabilización, procurando que no cambiaran
de manera brusca las condiciones en las que se encontraron. Se buscó
que tuvieran la menor intervención posible, pensando en la posibilidad
de realizar análisis en un futuro.
El
trabajo de los especialistas en conservación es uno de los más
minuciosos, el cual no sólo se concreta al proceso de excavación,
ya que en muchas ocasiones trabajan con los objetos durante largos periodos,
incluso años, gracias a lo cual, podemos mostrar a los visitantes
del museo muchas de las piezas que se han encontrado en las excavaciones.
¿Por
qué se conservaron textiles, papel y otros objetos perecederos?
De acuerdo con la restauradora Lourdes Gallardo, la conservación
de los materiales fue excepcional, debido a que la caja estaba sellada,
sin aire, sin luz, con presencia de algunos materiales que inhiben el
desarrollo de microorganismos, como sería el caso del cobre, y
con un microambiente en equilibrio al interior.
¿Serán
exhibidos estos materiales?
En la exposición temporal "Las ofendas a Tláloc",
no estarán presentes los elementos de papel, de madera y los textiles.
Como ya se mencionó, el proceso por el que tienen que pasar antes
de que se puedan exponer es muy minucioso y muy largo. Sin embargo, parte
de éstos, como el chaleco (xicolli), que formaba parte de las vestimentas
de un sacerdote, serán expuestos a finales de este año.
Esté pendiente de la página de exposiciones temporales.
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