La natividad de Jesús tiene una especial trascendencia en nuestras tradiciones y en ferias populares. En Oaxaca, se recrea con la originalidad creativa y efímera de una muestra de rábanos que cobran vida a capricho de los artistas locales.

La Noche de Rábanos es una fiesta tradicional de sello netamente popular en la que los hortelanos y floricultores exhiben el talento artístico de sus manos con diseños especiales realizados en rábano, flor inmortal y el totomoxtle. La exhibición dura sólo unas horas, pero congrega prácticamente a todos los habitantes de la ciudad en el área del zócalo, quienes concurren con el objeto de admirar la creatividad de los participantes en este concurso que año con año se realiza el 23 de diciembre.

Sobre el origen de esta tradición, diversas versiones coinciden en que tiene su arraigo en el mercado de la Vigilia de Navidad que se realizaba precisamente cada 23 de diciembre.