Mario Vargas Llosa y Gilles Lipovetsky reflexionan sobre La civilización del espectáculo

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Información: CGP
Comunicado No. 923/2012
25 de abril de 2012

***El Premio Nobel de Literatura 2010 entabló un diálogo con el filósofo y sociólogo francés a propósito de su ensayo publicado por Alfaguara

***El encuentro fue transmitido vía Internet

La educación como uno de los grandes campos de trabajo del siglo XXI para formar mejores seres humanos, fue una de las reflexiones que compartió el filósofo y sociólogo francés Gilles Lipovetsky con el escritor Mario Vargas Llosa, en un diálogo entablado en el Instituto Cervantes de España, como parte de la presentación del libro La civilización del espectáculo.

En el evento que pudo seguirse vía internet, el Premio Nobel de Literatura 2010 abordó aspectos del ensayo publicado por editorial Alfaguara en el que desarrolla cómo en la actualidad la cultura funciona como mecanismo de distracción y entretenimiento, mientras que la figura del intelectual ha desaparecido del debate público.

“El libro no quiere ser pesimista pero incita a reflexionar sobre si esa importancia esencial y hegemónica que ha tomado el entretenimiento y la diversión en nuestro tiempo, puede convertirse en la columna vertebral de la vida cultural”, explicó Vargas Llosa.

Por su parte, Lipovetsky aseguró que la cultura se ha convertido en una celda del consumo, por lo que en la actualidad ya nadie puede pensar que ésta  cambiará  la vida.

“En la civilización del espectáculo  lo que esperamos de la cultura es divertimento porque hoy lo que cambia la vida es el capitalismo, las técnicas y la cultura viene a ser la aureola de todo esto.

“La vida no es sólo cultura, también es la política, la democracia, las relaciones con los demás, la relación con el placer y con muchos otros elementos. En este plano, me parece que podemos decir que la sociedad del espectáculo y de consumo, al mismo tiempo que ha masificado comportamientos, ha dado un grado mayor de autonomía a las personas y ha hecho que caigan los mega discursos, las grandes ideologías políticas que marcaban a los individuos y que los ponían dentro de un régimen”.

Sin embargo, Vargas Llosa consideró que el desplome de la alta cultura ha significado el triunfo de una gran confusión que ha derribado valores estéticos sobre los que ya no existe un canon u orden de relación que la vieja cultura había establecido.

“Yo creo que la cultura es mucho más que entretenimiento, el gran arte, la alta cultura producen un individuo armado para vivir mejor y ser más consciente de la problemática en la que está inmerso; ser más lucido sobre lo que anda bien o mal en el mundo y porque esa sensibilidad formada le permite defenderse mejor contra la adversidad, gozar más y sufrir menos”.

Lipovetsky argumentó que se considera más escéptico en la alta cultura, pues no está convencido de que pueda preservarnos y protegernos de la violencia o el totalitarismo.

“Hoy no sólo la alta cultura defiende los altos valores, en muchos campos la televisión y el cine y todo un conjunto de producción de masas celebra los derechos humanos, la dignidad humana, no como obras consagradas por la historia pero que a pesar de todo difunden la ideología humanista.

“La sociedad de consumo del espectáculo ha contribuido con muchas cosas al bienestar, a la apertura de opiniones, ha disuelto las grandes ideologías, ha dado más autonomía privada”.

Si bien el escritor Mario Vargas Llosa reconoció puntos en común y algunas discrepancias de opinión con el autor de libros como La era del vacío y El imperio de lo efímero, coincidió en que la educación debe ser uno de los grandes instrumentos para que la sociedad moderna llene ese vacío espiritual que lo aqueja, por lo que es necesario trabajar en ello.

Mientras que Gilles Lipovetsky dijo que la sociedad no va a ser sólo técnica y herramienta, sino hombres armados en sus cabezas y deseos en donde la escuela debe ayudarlos a conseguirlo.

“La alta cultura es uno de los instrumentos pero no el único, tenemos que repensar la escuela en la era de internet, repensar qué es la educación en una sociedad que ya no tiene las referencias de antaño, es un trabajo enorme que va a diseñar el mundo de mañana”.

La civilización del espectáculo editado por Alfaguara ya se encuentra a la venta en México, mientras que en España ha ocupado los primeros lugares en venta en su primer semana.