El Instituto Nacional de Bellas Artes y el Museo Tamayo Arte Contemporáneo presentan la exposición
Crónicas de la ausencia Óscar Muñoz y Rosângela Rennó
26 de febrero a 21 de junio de 2009
Crónicas de la ausencia es una exposición que organizó el Museo Tamayo Arte Contemporáneo, cuyo objetivo fue reflexionar sobre la amnesia social. Las obras que se presentaron pertenecen a dos artistas contemporáneos de Latinoamérica: Óscar Muñoz (Colombia, 1951) y Rosângela Rennó (Brasil, 1962), quienes a través de fotografías, instalaciones y videos rescatan un pasado ausente.
La exposición comprendió una selección de trabajos producidos desde inicios de los años noventa, hasta obra reciente que aborda la memoria y el olvido como ideas interdependientes.
El público visitante pudo apreciar piezas artísticas que remitían a memoriales, individuos anónimos, e incluso personas desaparecidas; estas obras abordaban el tema de la omisión social en relación con imágenes que tanto Muñoz como Rennó se apropian para recontextualizarlas e insertarlas en el mundo del arte.
La ausencia
La constante producción de innumerables imágenes en la sociedad demuestra lo mucho que recurrimos a ellas para recordar e ilustrar ciertos acontecimientos, aunque simultáneamente, en la inmediatez del consumo, una gran cantidad sea desechada. En otros tiempos, las fotografías representaron una relevante guía de aquello que debíamos mirar; hoy, no propician de la misma manera el “ver”.
La indiferencia, la incapacidad de retención y los mecanismos de autodefensa que desarrollamos ante algunas narrativas, que optamos por dejar en el olvido, son algunos ejemplos de posturas sociales que Óscar Muñoz y Rosângela Rennó trajeron a relucir en cada una de sus investigaciones.
A partir de casos históricos, políticos, íntimos y familiares, Muñoz y Rennó indagó –mediante sus procesos artísticos individuales– la temática de la fragilidad de los recuerdos, así como la complejidad detrás de los valores actuales de la imagen fotográfica.
Ambos artistas abordaron el inevitable desgaste de los significados de la imagen a través de fotografías cotidianas a nuestro alrededor –como las de relatos de prensa o álbumes de familia. Al manipular material fotográfico ignorado, Muñoz y Rennó evidenciaron los procesos selectivos implícitos detrás de ciertas prácticas sociales comunes, y retrataron el rostro de actitudes colectivas que no siempre se ven, pero existen.
Las crónicas
Como nuevos cronistas que retoman relatos del pasado, Muñoz y Rennó alternaron las narrativas originales para reconstruir significados en el presente. El carácter de “crónica” proviene del acercamiento entre lo periodístico y lo narrativo, que obligó a los artistas a emplear sus propios ejercicios de memoria para recomponer los casos que recuperan, mientras aludían al desvanecimiento del recuerdo.
Las imágenes que se presentaron en la exhibición son frágiles y fuertes; se sostienen en su falta de adherencia a un mundo de imágenes desechables y su poder radica en la insistencia por anticiparse al olvido. Esta conciencia les confiere un sentido nuevo y difusamente trascendente que las ata y aleja de las crónicas de la ausencia de las que forman parte.