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Reflexión sobre el vacío existencial y los problemas de la adolescencia

Estrena la Cineteca Nacional el filme francés La edad atómica

30 de abril de 2014

  • A partir del próximo viernes 2 de mayo en la Sala 7, Alejandro Galindo del complejo cinematográfico del Conaculta
  • Obtuvo en 2012 Premio Fipresci en el Festival Internacional de Cine de Berlín, y el galardón Jean Vigo a la Mejor Ópera Prima

Las dificultades existenciales, los sentimientos de vacío y la falta de comprensión; la búsqueda del camino hacia quién sabe dónde, las frustraciones emocionales y sexuales que padecen los adolescentes, son el sustento del primer largometraje de ficción de Héléna Klotz, La edad atómica (Francia, 2012), que se estrena el próximo viernes 2 de mayo en la Cineteca Nacional.

El filme ganador del Premio Fipresci en el Festival Internacional de Cine de Berlín en 2012 así como del galardón Jean Vigo a la Mejor Ópera Prima, es la primera entrega de una trilogía sobre la juventud de la debutante gala, quien anteriormente ha escrito y dirigido documental y cortometraje.

Se trata de un filme que aborda los problemas existenciales a los que se enfrentan los adolescentes de cualquier época: la falta de camino, la búsqueda de una identidad marcada por la desigualdad social, el consumo de alcohol, el enfrentamiento a la homosexualidad y las decepciones amorosas y sexuales.

Contextualizada en una Francia moderna y fría, la historia nos sugiera a dos jóvenes por demás derrotados, cuyo aspecto refleja desde un inicio que sus vidas no les son gratificantes. Con aparente dirección hacia ningún lado, llegan a un destino, concurrido por jóvenes de su edad, igual de confundidos y con una alegría momentánea, motivada seguramente por el exceso de alcohol, pero seguro por el consumo de algún estupefaciente.

Víctor (Eliott Paquet) y Rainer (Dominik Wojcik) son un par de amigos que se pierden en la oscuridad de la noche y de sus propias existencias, las cuales parecen llevar sin sentido y sin un camino concreto. Los personajes con los que interactúan a lo largo de la noche, todos adolescentes como ellos, tampoco saben exactamente lo que buscan, pero lo que sí es seguro es que si es necesario pelearan por defender aquello poco en lo que creen.

Bares, trenes, estaciones, vías, bosques oscuros y fríos, espacios en los que se adentran buscando ser aceptados, pero lejos de eso, son rechazados por las mujeres, por los otros jóvenes y por los adultos, y no es por  algo en particular, es simplemente porque a esa edad es difícil adaptarse, sobre todo a entornos hostiles como la vida misma.

No se sabe ni se dice si sus vidas familiares o académicas forman parte de esta melancólica personalidad, pero queda claro que nada en la vida de estos personajes vale la pena para abandonar la tristeza que les invade a ambos.

Víctor está buscando perder su virginidad con la chica más bella de la noche y llegar con ella hasta el amanecer, mientras que Rainer ha memorizado poesías románticas y melancólicas, ya que el insomnio le ha atormentado varias noches. Ninguno de los dos obtendrá lo que busca esta noche, pero las enseñanzas quizá les ayuden a encontrarlo muy pronto.

Juntos recorren la noche bajo el frío parisino y luego de muchos más fracasos de los que esperaban, y solo al aislarse del mundo y adentrarse a la obscuridad del bosque, lograrán desprenderse de sus sentimientos de vacío y dolor. Su búsqueda, entonces parece llegar a algo, el encuentro con ellos mismos y a aceptar que se encuentran en el camino de ser lo que tengan que ser, pero no pronto, sino en un tiempo que aún se vislumbra lejano.

El metraje es de una producción sencilla, filmada en formato digital, en la que predomina la obscuridad de la noche. Tomas intercaladas entre los planos abiertos que vislumbran la frialdad de un París nocturno, y acercamientos a los bellos rostros de los jóvenes agobiados, que a ratos lloran, ríen y sueñan, retratados por Hélène Llouvart. Las imágenes nos aportan el carácter de estrechez, que nos permite sentir el dolor de esa edad previa a la juventud, que atrapa a los personajes en un cúmulo de sentimientos propios de la búsqueda del amor, las emociones fuertes y la identidad.

Sin tratar de ser pretenciosa, la directora nos presenta a lo largo de 67 minutos, una pieza en la que la intriga no es más que aquella propia de la edad de los protagonistas, que podría ser la de cualquier adolescente del mundo, de cualquier época y entorno social.

La edad atómica se entrena el próximo viernes 2 de mayo en la Sala 7, Alejandro Galindo, a las 17 y 21 horas, y formará parte de la programación durante las próximas semanas en distintos horarios que se pueden consultar en:

http://www.cinetecanacional.net/php/detallePelicula.php?clv=10840&Tit=Estrenos

NAM

México,Distrito Federal