Exhiben máscaras diabólicas en alusión a las festividades guerrerenses

  • Patrimonio cultural, arquitectura y turismo
Información: COG
Comunicado No. 2255/2011
20 de octubre de 2011

***Apoyada por el Conaculta, la muestra Los Diablos de Guerrero presenta piezas procedentes de Teloloapan y Cuajinicuilapa

***Cierra este 22 de octubre en la Sala Ixcateopan del Centro Cultural Acapulco

Los Diablos de Guerrero, la reciente exposición apoyada por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes a través del Instituto Nacional de Antropología e Historia y el Instituto Guerrerense de la Cultura, exponen diversas máscaras de diablos alusivos a las fiestas de los municipios participantes.

Los Diablos de Guerrero, obra expuesta en la galería Ixcateopan del Centro Cultural Acapulco, es una exposición que consiste principalmente en máscaras de dos espacios geográficos de Guerrero que son Teloloapan y Cuajinicuilapa.

Teloloapan pertenece al municipio del mismo nombre en el estado de Guerrero, Sierra Madre del Sur en la región norte, mientras que el municipio de Cuajinicuilapa se encuentra en la región Costa Chica, al sureste de Chilpancingo, sobre la carretera federal de Acapulco-Pinotepa Nacional, Oaxaca.

Jeanette Rojas Dib, directora de Galerías y Arte del Instituto Guerrerense de la Cultura, comentó en entrevista con Conaculta que la exposición “muestra máscaras de diablos que son diferentes entre sí, ya que las de Cuajinicuilapa son máscaras que tienen más representaciones hacia lo africano, máscaras que tienen una intensión festiva; son diablos traviesos e irreverentes.”

        Así mismo, Rojas Dib comenta que las máscaras de Teloloapan están hechas de madera pero no en forma de monolito, sino que están talladas y se van integrando en diferentes partes, la diferencia fundamental es que las de Teoloapan tienen varios elementos en la misma máscara y funcionan más como una especie de alebrije, por decirlo de alguna forma. Es decir, esta máscara tiene varios elementos incrustados como por ejemplo cuatro, seis serpientes saliéndole del frente de la máscara, dos bocas, dos lenguas,  sobre la lengua saliéndole dos serpientes.

        Comenta que en las máscaras más contemporáneas ya se involucra a la figura humana dentro de las mismas. Por ejemplo, los peleadores de Teloloapan que es un hombre vestido de diablo con máscara de diablo con fuera y botas, en la máscara también aparecen figuras de hombres que pelean contra otros hombres comunes.

        Estas máscaras están elaboradas en una sola pieza, y utilizan mecate para los cabellos, cuernos de diferentes tipos de animales como de chivo, borrego, toros, pezuñas, maderas y materiales naturales.

        Las de Cuajinicuilapa tienen colores serios y naturales como ocres, tierra y las de Teloloapan son de colores vivos. Las máscaras son fabricadas por los artesanos de ambos pueblos de Guerrero, donde son oficios y tradiciones que utilizan en las fiestas. Cuajinicuilapa es un pueblo donde predomina la raza negra por lo que la historia de la máscara tiene tendencias africanas y tiene un símbolo más festivo.

        La exposición también muestra un video documental sobre la historia de las máscaras, ya que tiene un origen independentista y de prestigio.

        La leyenda cuenta que los habitantes del pueblo elaboraron las primeras máscaras de manera sencilla, eran utilizadas para asustar a los Insurgentes que querían tomar al pueblo. Entonces se organizaron para disfrazarse con las fueras y látigos e hicieron hogueras por todo el pueblo, tomaron por sorpresa a los Insurgentes, los desarmaron y lograron vencer esa batalla.

        Esta es la razón por la cual el pueblo está muy orgulloso de las máscaras. Todos los 16 de septiembre sus habitantes se disfrazan de diablos y bailan por las calles, disfrutando de su libertad; hay un concurso de máscaras e incluso el escudo del pueblo es la misma máscara, donde es símbolo de valor, honor, independencia, lucha y astucia, (porque finalmente lo que lograron fue asustar a sus enemigos y disfrazarlos de diablos).

        Finalmente, la directora de Galerías y Arte del Instituto Guerrerense de la Cultura comenta que para ella es una muestra de identidad, “somos seres apasionados, trascendentales, alegres, es un ícono que representan a los guerrerenses”.

        Es la primera vez que se monta la exposición en la sala Ixcateopan, anteriormente ya se había montado en Acapulco en el Museo Histórico Fuerte de San Diego y ahora en esta galería del Centro Cultural Acapulco.

        La exposición Permanecerá en la Sala Ixcateopan del Centro Cultural Acapulco hasta el sábado 22 de octubre.